Consejos para pintar puertas metálicas

En esta oportunidad te vamos a compartir algunos consejos para pintar puertas metálicas, ya que como sabrás, este procedimiento difiere del que se hace cuando se trata de pintar puertas de madera. Para empezar debes saber que este tipo de puertas por lo general son robustas y requieren de un mantenimiento algo más frecuente. Para su protección es necesario que tengan una capa de pintura que las proteja del clima y la oxidación, lo cual puede debilitar su estructura.

¿Cuál es el mejor momento para pintar puertas metálicas?

El mejor momento para pintar las puertas metálicas es cuando la pintura antigua se muestra desgastada o tiene ralladuras. También puede ser conveniente el pintado de las puertas cuando se ha pintado la facha de nuestra vivienda con un nuevo color, ya que de esta manera nos aseguramos que ambos elementos se complementen a la perfección.

Tips para pintar puertas de metal

El objetivo de pintar una puerta metálica que muestra deterioro, no es el de ocultar toda la suciedad que existe, ya que lo único que se consigue con esto es crear una capa de costa que agrega una mala apariencia a la puerta e incluso la deteriora todavía más. La puerta metálica exterior debe lucir una apariencia visualmente agradable y en sintonía con el resto de la decoración de la fachada.

Para que esto sea así, a la puerta primero debemos hacerle un cepillado para eliminar todo el óxido presente, así como las partículas sueltas. Luego de esto deberemos aplicar sobre las soldaduras, una pintura de galvanizado en frío. Cuando la pintura este seca, será necesario que se aplique una imprimación sobre esa área cepillada.

Debes entonces proceder a pintar la puerta metálica en función de las especificaciones del propio fabricante. No olvides que para pintar de nuevo la puerta debes considerar el tipo, así como el color que tenga, ya que en base a esto lo más seguro es que vayas a necesitar un tipo diferente de pintura.

Al comenzar a pintar la puerta de metal, utiliza un decapante para las antiguas capas de pintura ya recuerda que la superficie decapada puede mostrar zonas rugosas que se eliminan lijando la superficie perfectamente. Si el metal queda al descubierto, es posible que la pintura no se adhiera, por lo que será necesario aplicar una imprimación determinada.

Es recomendable que utilices un transformador de óxido ya que te permiten convertir el óxido en capa protectora. Lo ideal es que apliques estos productosde limpieza,  únicamente en las áreas oxidadas que no se hayan limpiado del todo. Después asegúrate de preparar la superficie de la puerta con el cepillado para desprender las capas de pintura más sencillas.

Luego, si utilizas un decapante que ablande la pintura, deberás utilizar un cepillo de púas para alcanzar los rincones menos accesibles. Finalmente debes lavar con mucha agua toda la superficie para limpiarla y con ello evitar que la pintura se deteriore al cabo de poco tiempo.

Cuando la puerta metálica se encuentra preparada, desoxidada y seca, lo que sigue es aplicar la pintura asegurándose de combinar la dirección de cada pasada. Lo primero es aplicar una imprimación que funcione como antioxidante y permita una mejor adherencia.

Por lo que respecta a la selección del color, esto es a tu gusto, sin embargo conviene que sea un color que se complemente con el resto del exterior de tu hogar. Recuerda al pintar una puerta metalica debes pintar primero las esquinas con una brocha y al final la superficie más grande con un rodillo.